lunes, 29 de diciembre de 2008
SER POSITIVO
lunes, 15 de diciembre de 2008
SOBRE EL SUFRIMIENTO
domingo, 30 de noviembre de 2008
OPINIONES
Siempre he pensado que había que tener opiniones sobre las cosas, definirse frente a la realidad, tener las ideas claras, y tratar de ser coherente con ellas. Opiniones sobre al aborto, sobre la inmigración, sobre la eutanasia, sobre la globalización, etc. No tener opiniones era para mí indicativo de desinterés, de conformismo, de mediocridad. Una persona sin opinión sobre esto y lo otro me parecía alguien poco interesante.
domingo, 16 de noviembre de 2008
EL SENTIDO DEL HUMOR
No confundamos: no es lo mismo el que se dedica profesionalmente a contar chistes, que el que se dedica al humor. El primero no hace otra cosa que contar chistes, y lo puede hacer con más o menos talento, mientras que el segundo lo que hace es inventar, crear ocurrencias graciosas. Una cosa es el cuentachistes y otra el humorista.
Y una cosa es ser gracioso y otra tener sentido del humor. Lo primero consiste en hacer reír a los demás. Lo segundo implica, además, tener una perspectiva amplia de la vida, una tendencia a relativizar los acontecimientos, una actitud un poco irónica. Es tan importante el sentido del humor que es rara la persona que admite no tenerlo. Cuando se le dice a alguien que no lo tiene, es habitual que se sienta ofendido y niegue lo que percibe como una acusación... reacción comprensible en alguien sin sentido del humor.
La risa y el sentido del humor no tienen por qué coexistir en la misma persona. He conocido personas que reían mucho, pero no tenían sentido del humor. A mí me interesan ambas cosas. Según mi experiencia, compartir el sentido del humor es algo importante a la hora de la seducción. Me gusta que ella se ría de mis ocurrencias, pero sólo cuando pienso que lo merecen. Una vez salí con una chica que se reía de cosas que a mí no me hacían ninguna gracia, lo que me proporcionaba una sensación desagradable. También me chirría el hecho de que la chica no se ría de alguna ocurrencia que a mí me resulta graciosa. Según algunos estudios, el hombre percibe como más atractiva a la mujer a la que hace reír fácilmente, mientras que la mujer percibe como más atractivo al hombre que sabe hacerla reír. Definitivamente, creo que un sentido del humor afín es más importante de lo que pueda parecer a la hora de establecer una relación.
En el sentido del humor se refleja nuestra manera de pensar, de percibir, de razonar. Si hay algo descorazonador es el hecho de contar o hacer algo con entusiasmo para obtener la risa de un grupo de oyentes, y no conseguir el objetivo. Y al revés: pocas cosas pueden ser tan reforzantes como desatar la risa de un grupo de personas. Pero probablemente lo mejor de todo sea reír juntos. Creo que es la segunda cosa que más une a dos personas. La primera es compartir las lágrimas.
jueves, 30 de octubre de 2008
LIBERARSE DEL PASADO
1. Haber hecho lo que no quisimos hacer.
2. No haber hecho lo que quisimos hacer.
En el segundo caso hay que saber que el pasado no es algo estático e inamovible, sino que cambia y se transforma a medida que cambiamos nosotros y nuestra vida.
Supongamos que alguien tiene un accidente con la moto. En el hospital maldecirá la hora en que cometió el error que lo llevó a estar allí ingresado. El accidente ha sido un mal. Pero resulta que en el hospital se enamora de una de las enfermeras y es correspondido, entonces se alegrará de haber tenido el accidente. El accidente ha sido un bien, ya que gracias a él a conocido a la mujer de su vida... que lo deja meses después para irse con otro. El accidente vuelve a ser un mal.
miércoles, 15 de octubre de 2008
EL TIEMPO Y YO
Conozco a alguien que durante varios años de su vida se dedicó a dos cosas: trabajar y cuidar de su madre, enferma de Alzheimer. Me contó que más de una vez, la gente le hizo comentarios del tipo: “es una pena, se te está pasando la vida y no estas viviendo, no te has casado, no tienes hijos, siempre cuidando de tu madre...”, y él se mostraba en desacuerdo: “¿qué tontería es esa de que no estoy viviendo?”
¿Qué es aprovechar el tiempo? ¿qué es perderlo? El convencionalismo ha establecido un guión de vida que considera como lo correcto y lo ideal tener un buen trabajo, emparejarse, tener hijos... y toda vida que no se ciña al guión tiende a desvalorizarse. Hay quien piensa que si has tenido dos semanas de vacaciones y no has viajado a ningún sitio has perdido el tiempo. O que has malgastado tu vida si llegas al final de ella sin haberte casado o haber formado una familia. Pero la idea de productividad es, simplemente, subjetiva. Pasar dos horas leyendo puede ser una pérdida de tiempo para quien detesta la lectura, y ver una película de acción puede serlo para quien disfruta leyendo. Las personas tienen gustos e intereses diferentes.
Pero a otro nivel, el concepto de aprovechar o perder el tiempo tiene más que ver con la relación que mantienes con la realidad que con lo que haces o dejas de hacer. Supongamos que tienes que realizar un trámite administrativo y debes esperar una cola durante una hora. Una hora que podías pasar leyendo, oyendo música, hablando con un amigo, paseando... pero nada de eso es posible y no te queda más remedio que esperar. Ante esto sólo caben dos opciones:
1. Impacientarte, mirar con frecuencia el reloj para saber cuánto tiempo llevas esperando, pensar en las cosas que podrías hacer... o sea, resistirte a la situación.
2. Aceptar que tu función en ese momento es, simplemente, esperar a que llegue tu turno, y permanecer tranquilamente en estado de atención.
En el primer caso, se pensará que se ha perdido el tiempo en la cola.
En el segundo, que se ha hecho lo que tenía que hacer, y por tanto la pérdida o ganancia del tiempo no se plantea.
domingo, 28 de septiembre de 2008
NI BUENO NI MALO
Así es la vida. Nunca cantes victoria. Nunca saques la bandera blanca. Nunca se sabe. Se conoce la historia de un sabio que ganó un coche de lujo en un sorteo. Todos le decían: qué suerte tienes, y él contestaba: puede ser. Un día tuvo un accidente con el coche al cruzarse un borracho con él, y fue ingresado en el hospital. Todos le decían: qué mala suerte, y él contestaba: puede ser. Durante la estancia en el hospital, hubo un corrimiento de tierras y su casa quedó sepultada. Sus vecinos murieron, pero él se salvó al estar en el hospital. Todos le decían: qué suerte, y él seguía diciendo... puede ser.
Los sabios orientales lo han dicho siempre: no juzgues lo que ocurre, no lo consideres bueno o malo, eso implica una perspectiva limitada de la realidad. Simplemente acepta lo que pasa. Una tragedia se puede convertir en una bendición, y una bendición en una tragedia. Al final los hechos se confunden, y cuando se es consciente de esto no queda otra que sentir una cierta paz. Cada lágrima contiene la semilla de una sonrisa. Se trata de aprender a hacerla germinar.
sábado, 13 de septiembre de 2008
SUERTE Y DESTINO
En “Largo domingo de noviazgo”, Adrey Totou juega a controlar el destino: “si llego a la curva antes que el coche, mi novio volverá de la guerra”, “si entra el revisor antes de que cuente hasta diez, mi novio está vivo”. Cuando yo era un adolescente soñador solía jugar a eso. “Si meto tres canastas seguidas, le gusto a Yolanda”. La ilusión de controlar la vida, la suerte, el destino.
Se podría hablar de tres perspectivas. Una, la de los que consideran que somos náufragos en el mar de la vida, que no tenemos ninguna capacidad de controlar nuestras circunstancias. No somos más que simples marionetas en manos del destino.
La segunda es la de los que piensan que podemos controlar totalmente nuestra vida, que querer es poder, que todo es cuestión de proponérselo y luchar por ello. La diferencia entre la realidad y los sueños es la fe que tengas en verlos cumplidos.
Y por último, está la perspectiva de los que piensan que nuestra suerte depende en gran medida de nosotros, que la suerte no te toca, sino que se crea, pero que el azar también tiene su papel. Podemos controlar mucho, pero no todo.
domingo, 31 de agosto de 2008
SER PADRE
Los hijos se hacen y los padres también. No es fácil, desde luego. Ser p/madre implica delegar parte de tu felicidad en tu hijo. Hay quienes cometen el error de delegar demasiada, lo que lleva a sobreproteger al niño y formar una personalidad insegura. Otros se quedan cortos, lo que hace que el niño crezca con carencias afectivas y busque cubrirlas a través medios inadecuados.
Otros emplean el argumento de la edad y la experiencia para tratar de imponerse: “Cuando seas padre sabrás lo que es... ahora eres joven y no...”.
Pero los padres a veces tienen razón y a veces no. Es inútil pretender que la educación recibida por los padres sea aplicable al 100% a sus hijos. El mundo de los hijos no es el mundo en el que vivieron sus padres.
Termino con algo que cuenta Jorge Bucay:
Un niño le pregunta a su padre:
- Papá, ¿todos los papás saben más que sus hijos?
- Sí, los papás saben más.
- ¿Por qué?
- Porque son los papás.
- ¿Y por qué saben más?
- Porque tienen más años, han leído más, han vivido más...
- Dime papá, ¿quién inventó el teléfono?
- Alexander Graham Bell
- ¿Y por qué no lo inventó su padre, que sabía más?
viernes, 15 de agosto de 2008
INCERTIDUMBRE
A veces, cuando alguien me cuenta algo que le ha ocurrido y le aflige, suelo ponerlo en perspectiva para relativizarlo con algún comentario como: “a lo mejor mañana te atropella un coche, o la semana que viene descubres que tienes cáncer... “ La reacción habitual es: “hala, qué drástico, qué negativo”. Y siempre me digo lo mismo: no se trata de pensarlo, sino de ser consciente de ello. ¿Drástico? Según se mire. Si se piensa que la vida es maravillosa y no puede pasar nada malo y si pasa es una desgracia, pues sí, es drástico. Pero si se piensa que en cualquier segundo puede ocurrir cualquier cosa, no veo por qué tiene que serlo. Es, simplemente, la misma realidad. Siempre puede ocurrir algo doloroso. ¿Es esto ser negativo? No. Uno sería negativo si permitiera que ese pensamiento le limitara por medio del miedo o de la tristeza.
- No séra una fiesta de disfraces.
- No.
Está claro, ¿no? Hay que vivir ya, ahora mismo. El futuro es una hipótesis, una pompa de jabón, una trampa en la que caemos con demasiada facilidad. Creo que fue Unamuno el que dijo: “Mañana, siempre mañana... y nunca mañanamos”.
Una vez vi impreso en una camiseta: “Sonríe. Mañana puedes morir”. Yo diría más: esta noche puedes morir. O dentro de una hora. O quince minutos. O cinco, cuatro, tres... ¿a qué esperas para decirme que me quieres?
martes, 29 de julio de 2008
EL PODER DE LAS PALABRAS
Nuestras emociones estan en parte condicionadas por nuestros pensamientos, y éstos no son otra cosa que ideas que, con frecuencia, se traducen en palabras. Por eso es importante prestar atención a la manera en que usamos las palabras. No sólo sirven para describir la realidad, sino para crearla.
No es lo mismo decir: "te veo más gordo" que "te veo menos delgado".
Ni afirmar: "ese pianista es buenísimo" que "me encanta ese pianista".
Otro ejemplo: "ve más lento" o "no vayas tan rápido"
"Tratamiento de residuos" o "recogida de basuras"
"Retirada" o "avance hacia la retaguardia"
Es crucial saber usarlas con sabiduría para relacionarnos de forma sana con nosotros mismos y con los demás. El psiquiatra Luis Rojas Marcos dice: "Hablar con los demás y escuchar hablar a otros es una actividad humana fundamental. Gracias a las palabras ningún ser humano es una isla.".
Dos chicos hicieron una carrera. El que perdió dijo al vencedor: "has quedado penúltimo, pero yo he sido segundo".
Nunca por muy pocas veces
Siempre por a menudo
Me desilusionó por lo imaginé erróneamente
Yo sé por yo creo
Bello, feo por me gusta, no me gusta
Así eres por así te percibo
Lo mío por lo que ahora tengo
Y por supuesto, no hay que olvidar aquel dicho: "no hables si lo que vas a decir no es más bello que el silencio".
martes, 15 de julio de 2008
MANTENER EL AMOR
CONSEJOS PARA MANTENER EL AMOR
Haz que se ría.
Si no lo consigues, haz que sonría.
Si no lo consigues, haz que no llore.
Si llora, límpia sus lágrimas con ternura.
Escúchala cuando hable
y también cuando calle.
Sorpréndela siempre que puedas.
Aléjate de ella de vez en cuando
para que se tonifique el deseo
de volver a estar juntos.
Acaricia sus heridas,
quítale las espinas
y plántala en el mejor lugar de tu jardín,
para que florezca sin complejos.
Baila con ella a la luz de la luna
y después invita al mundo
a bailar con vosotros.
No permitas que el miedo
ni la costumbre enturbien
vuestro camino.
Juega con ella, experimenta,
redescubre la vida y quédate
con aquello que ilumine vuestras almas.
Si finalmente esa persona te abandona
no dejes que tu sonrisa se marchite.
Ni el futuro se acaba
ni lo mejor ya ha pasado,
y más triste que no te amen
es no haber amado.
Mantén la cabeza alta
para ver el arco iris
que terminará apareciendo
y no olvides que nunca es tarde
para aplicar los consejos
de mi post anterior.
domingo, 29 de junio de 2008
ENCONTRAR EL AMOR
CONSEJOS PARA ENCONTRAR EL AMOR
Mira, escucha, huele,
toca, saborea, muévete,
curiosea, prueba, experimenta,
comparte, aprende, libérate,
expándete,
abraza la vida,
ámala con toda tu alma
y ella te regalará una sonrisa
cristalina y luminosa,
limpia de prejuicios y amarguras.
Llévala siempre contigo
y tarde o temprano,
cuando te cruces con la persona
que mejor refleje
la luz que llevas dentro,
mírala,
cuando te mire muéstrale tu sonrisa,
si te enseña la suya acércate y dile algo,
cualquier cosa sonará a música celestial.
Y cuando no tengas dudas
y caigan las primeras lluvias del otoño,
a ser posible en un parque solitario
y bajo un paraguas que os cubra a ambos,
mira a esa persona fíjamente a los ojos
y no dudes en decirle,
con el corazón en los labios,
que estas enamorado/a.
A continuación cierra los ojos y bésala.
Si al terminar observas un brillo en sus ojos
suelta el paraguas...
y vuelve a besarla.
sábado, 14 de junio de 2008
AMIGOS
Por eso pienso que hay que aprender el arte de la amistad. Quien tiene un amigo tiene mucho más que un tesoro.
Hay quien afirma que la amistad no existe, que todo el mundo busca su propio interés, o que la amistad entre hombres y mujeres es imposible. Me sorprenden esas ideas. ¿Qué sería de nosotros si fueran ciertas?
Se suele decir que en los momentos críticos de tu vida, cuando tienes un problema o sufres una desgracia, es cuando descubres quién es realmente tu amigo y quién no. Los amigos son los que no te dan de lado cuando todo se desmorona. Hasta ahí de acuerdo. Pero yo añadiría algo más.
Amigo es también el que está contigo en los buenos momentos, el que se alegra con tus victorias. Hay supuestos amigos de los que nada sabes cuando todo te va bien, pero en cuanto se enteran de que andas en aprietos acuden a ti dispuestos a ofrecerte su apoyo sin contemplaciones. Sospecho que esa “amistad de emergencia” les sirve para consolarse de su propia infelicidad. La desgracia de alguien cercano les ayuda a olvidar la suya.
No quiero amigos que vengan a secarme las lágrimas, porque como leí una vez: “el verdadero amigo no es el que nos seca las lágrimas, sino el que evita que las derramemos”.
sábado, 31 de mayo de 2008
SOBRE LA FELICIDAD
Hace poco le pregunté a una amiga si era feliz, y me contestó que “la felicidad son momentos que de vez en cuando llegan y se van. No es algo permanente”. Como si lo normal fuera no ser feliz, a excepción de algunos instantes. Es todo un tópico, pero no me convence. Es como si pregunto a alguien que está haciendo algún curso si le va bien, y me responde: “No se puede sacar buena nota siempre. De vez en cuando me ponen un sobresaliente o un notable...” Está claro que no puedes sacar siempre matrícula, a no ser que seas un crack, pero sí es posible hacer que las buenas notas sean frecuentes. Y en tanto lo sean, se podrá decir que a uno le va bien.
lunes, 12 de mayo de 2008
VIVIR ES ELEGIR
¿Existe Dios? ¿Acaba todo con la muerte? ¿Hay vida inteligente en otros planetas? ¿Existen los espíritus? ¿Cómo surgió la vida? ¿Por qué se extinguieron los dinosaurios? ¿Quién fue Jack el destripador? ¿Fue asesinada Marylin Monroe? ¿Se puede adivinar el futuro? ¿Soy feliz? ¿Acepto este trabajo? ¿Le cuento a mi hijo la verdad? ¿He hecho algo mal? ¿Me matriculo en esta carrera? ¿Por qué me ha dicho eso? ¿Cuál coche me compro? ¿La invito a salir? ¿Me sienta bien esta camisa? ¿Voy o no voy? ¿Me apunto en este gimnasio? ¿Por qué me siento así?
martes, 22 de abril de 2008
ABRIR EL CORAZÓN
Hace años vi una película titulada "Secretos y mentiras". En ella los miembros de una familia se guardan rencores y secretos, hasta que llega un momento, en una comida, en que uno de ellos desnuda su alma ante todos, tras lo cual dice: "Ya está, lo he dicho. ¿Dónde están los rayos?... secretos y mentiras... ¡todos sufrimos!, ¿por qué no lo compartimos?".
Qué gran verdad. Cuánto daño nos hacemos guardándonos las heridas y dolores del alma. Observamos a alguien hacer o decir algo que catalogamos de ofensivo, y en lugar de expresarle el malestar que eso nos produce lo arrinconamos en un lugar del corazón y lo mantenemos allí, sin saber que el mal que se traga puede a su vez terminar tragándonos.
domingo, 6 de abril de 2008
EL PASADO QUE ATA
A veces nos equivocamos y nos hacemos daño, o se lo hacemos a los demás, o ambas cosas. Pero no nos damos cuenta, o lo hacemos pero nos justificamos de cualquier manera. Y así pasa el tiempo hasta que un día nos miramos en el espejo y lo vemos con claridad. Que metimos la pata. Que no estuvimos a la altura de nosotros mismos.
En ese momento tenemos dos opciones: castigarnos y torturarnos por haber fallado, o aceptar nuestro error y mirar hacia delante, con el propósito de repararlo en la medida en que aún sea posible, o de no volver a cometerlo.
Demasiada gente opta por la primera opción, aun teniendo aún cartas en el juego, lo cual no le beneficia a la hora de seguir jugando. Así, se equivocan doblemente: una vez al cometer el error, y otra al arrastrarlo. No hay que dejarse condicionar por la culpa. Nadie es perfecto y todos tenemos nuestros pecadillos y nuestras cicatrices. Oscar Wilde dijo: “la gente tiene la mala manía de contar a nuestras espaldas cosas de nosotros que son absolutamente ciertas”. Con frecuencia se encuentran personas con malas experiencias a sus espaldas que se dejan atar por ellas, como aquella cuyo matrimonio terminó en divorcio y ha dejado de creer en el amor, o aquella cuyo perro murió en un accidente y no quiere volver a tener ninguno.
La cuestión es integrar ese episodio oscuro, aceptarlo, y evitar así que condicione nuestra vida enturbiándola e impidiendo que fluya y nos permita crecer. Cuando uno recibe luz no debe lamentarse por haber vivido en la oscuridad, sino agradecer que ya no está a oscuras. El psicólogo Carlos Odriozola dice que "cualquier toma de conciencia es digna de celebración". Sólo así el pasado se convierte en un trampolín sobre el que impulsarnos, en lugar de ser una tela de araña que nos inmovilice.