domingo, 26 de agosto de 2007

LA VIDA ES DUDA

Hoy he vuelto a ver una película que me gustó: K-Pax. Va de un hombre que ingresan en un psiquiátrico porque dice ser de otro planeta. ¿Es un loco o un extraterrestre? La balanza se inclina a veces de un lado, a veces del otro, y termina con un final ambiguo. Por lo general nos gustaría que las cosas fueran siempre blancas o negras, que estuvieran bien delimitadas. Queremos tener todos los cabos bien atados, la sartén por el mango, las riendas de las circunstancias bien asidas. Eso nos proporciona sensación de control, seguridad, tranquilidad. Pero como dice una canción de Joaquín Sabina: "la vida no es un bloc cuadriculado, sino una golondrina en movimiento". La realidad es algo cambiante, mudable, provisional, y por tanto lleva implícita cierta dosis de incertidumbre con la que hay que aprender a vivir si no queremos ser demasiado vulnerables. Quien pretende tener el control de todo, saberlo todo, está expuesto a llevarse un palo tras otro. Antonio Gala suele decir que nuestra vida no es nuestra, sino nosotros de ella. Una de las cosas que se suelen aprender con el tiempo es que somos más ignorantes de lo que creíamos. Por eso a veces, la respuesta más sabia a una pregunta es: "no lo sé".

domingo, 12 de agosto de 2007

EL PLACER DE LA MÚSICA

Este verano buena parte de mi pasión por la música se está centrando en cantautores como Joan Manuel Serrat y Luis Eduardo Aute. Esa manera de conjugar una música melódica y una letra llena de poesía e inteligencia no está al alcance de cualquiera. Para mí es todo un placer escuchar canciones como "La belleza", de Aute, cuya letra no me resisto a transcribir.

Enemigo de la guerra
y su reverso, la medalla,
no propuse otra batalla
que librar al corazón
de ponerse cuerpo a tierra
bajo el peso de una historia
que iba a alzar hasta la gloria
el poder de la razón.
Y ahora que ya no hay trincheras
el combate es la escalera
y el que trepe a lo más alto
pondrá a salvo su cabeza
aunque se hunda en el asfalto
la belleza.

Míralos como reptiles,
al acecho de la presa,
negociando en cada mesa
maquillajes de ocasión;
siguen todos los raíles
que conduzcan a la cumbre
locos, porque nos deslumbre
su parásita ambición.
Antes iban de profetas
y ahora el éxito es su meta;
mercaderes, traficantes,
mas que náusea dan tristeza,
no rozaron ni un instante
la belleza.

Y me hablaron de futuros
fraternales, solidarios,
donde todo lo falsario
acabaría en el pilón.
Y ahora que se cae el muro
ya no somos tan iguales
tanto tienes, tanto vales
¡viva la revolución!
Reivindico el espejismo
de intentar ser uno mismo,
ese viaje hacia la nada
que consiste en la certeza
de encontrar en tu mirada
la belleza.