martes, 16 de noviembre de 2010

BUSCAR UN SENTIDO


Antes solía buscar un sentido a mis sufrimientos pasados. Me parecía el peor de los fracasos haber sufrido para nada. No podía limitarme a hacer una vida cualquiera tras sobrevivir a tantos infiernos. Tenía que hacer algo con mi vida, algo útil, algo importante.

Hoy pienso que quizás no tenga importancia saber por qué o para qué sufrí. Tal vez el sentido de todo aquello fue llegar hasta aquí, llegar a este momento. ¿No es suficiente, después de todo?

¿Volveré a bajar al infierno? Es una pregunta que me asalta de vez en cuando. Es tanto lo que he sufrido... ¿cómo podría soportar volver a pasar por aquello? Preguntas, miedos... desvaríos mentales.

No hay nada a lo que aferrarme. No puedo estar seguro del pasado. Viene y va, cambia, se disfraza y se ríe de mi, porque me engaña al hacerme creer que sigue vivo. El color con que se viste cambia según el momento que estoy viviendo. Lo que olvido, lo que recuerdo, es voluble e inestable.

Tampoco puedo estar seguro del futuro. Mis proyectos, mis planes, mis deseos, mis sueños, no son más que pompas de jabón zarandeadas por el viento, la lluvia y la nieve en una realidad indiferente. Todo es posible. Lo mejor y lo peor. ¿Miedo? ¿qué miedo? No hay nada que temer. ¿Esperanza? ¿qué esperanza? No hay nada que esperar. No hay nada.

Sólo esto. Sólo aquí. Sólo ahora.

4 comentarios:

tina dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
tina dijo...

hola alberto,
tus palabras me han parecido de una profundidad impresionante.Tal vez sea la primera vez que te leo con tantas emociones a flor de piel.
Un proceso personal que pese a ser duro nos lleva a darnos cuenta que un NADA sea el inicio de un TODO.
SUERTE!!!
UN FUERTE ABRAZO
CRISTINA

untopic dijo...

Impresionante.

Alberto dijo...

Gracias Cris. También te deseo suerte... si es que existe. Un abrazo.

Gracias Miguel. Me alegro de sentirte lo suficientemente perceptivo como para juzgar así mis palabras. Un abrazo.