lunes, 12 de abril de 2010

PROBLEMAS


Los problemas se pueden presentar de tres maneras:

  1. De uno en uno. Termina un problema y se presenta otro, y así sucesivamente. Supongo que es la ideal.

  1. De forma contaminante. Tengo un problema en una área de mi vida, y ese problema afecta a su vez a otra u otras. Por ejemplo: tengo problemas económicos y eso contribuye a empeorar la relación con mi pareja.

  1. En forma de abanico. Se despliegan todos al mismo tiempo. Mi hijo tiene un accidente, me quedo en el paro y se muere mi padre.


Cuando el problema te sobrepasa puedes caer en un círculo vicioso en el cual das vueltas y vueltas sin hacer nada. Para salir de esta parálisis hay que hacerse algunas preguntas clave: ¿qué pienso? ¿qué quiero? ¿qué necesito? ¿qué deseo? ¿qué puedo? ¿qué tengo? y por último ¿qué sé?

Hay problemas que no tienen solución, con lo cual lo único que cabe es aceptar eso.

Hay otros problemas que sí tienen solución, pero ésta no depende de mí, o sólo de mí, entonces hay que dejar que la parte del problema que no me corresponde se de sí misma.

Finalmente hay problemas cuya solución es a largo plazo. Solemos cometer el error de confundir estos problemas que requieren más tiempo con los que no tienen solución. Hay un adagio que dice: hay momentos para hacer las cosas, y hay momentos para dejar que las cosas se hagan.

3 comentarios:

Irinova dijo...

Encontré tu blog por casualidad y llevo leyéndolo un tiempo. El post de "problemas" de hoy me lleva a enviarte mi felicitación mediante unas simples letras. Gracias, me parece una muy positiva manera de escribir la tuya, y por supuesto transmitiendo cosas muy bonitas -si consideramos que "bonito" engloba todos esos adjetivos que buscas-. Eva.

Alberto dijo...

Siempre gusta sentir que se valora lo que uno hace, y si además eso proviene de alguien que no conozco, más aún. Gracias a ti por leer mi blog. Que nunca te canses de él.

Irinova dijo...

De vivir es difícil que alguien se canse. Encantada.