miércoles, 16 de mayo de 2007

PREJUICIOS


Me pasó hace unos días, y hoy me ha vuelto a pasar. Al no encontrar una camiseta que buscaba, he presupuesto que la había cogido mi madre para lavarla y me he dejado llevar por la frustración... para descubrir luego la camiseta donde no había mirado. Y quien piensa: “no encuentro la camiseta porque mi madre la ha cogido” piensa igualmente: “no me ha llamado porque no le gusto”, o “me ha dicho que no viene porque es un egoísta”, o “no me ha regalado nada porque se le ha olvidado”. Suposiciones y prejuicios que derrochan energía y nos hacen sufrir innecesariamente, pero a los cuales solemos estar muy habituados. Por eso no hay que dejar de prestar atención para descubrir cuándo estamos pensando sin necesidad, por inercia, por mal hábito. Sólo con atención constante podemos ir detectando y erradicando esa dinámica mental que tanto nos amarga la vida.

martes, 15 de mayo de 2007

TARDE DE LLUVIA

Hace varios días salí de una reunión y llovía copiosamente. Tenía el coche aparcado a unos diez minutos de caminata, y si quería llegar hasta él me iba a poner como una sopa. Me refugié en un portal donde una chica joven buscaba su móvil sonando en un bolso que había puesto en el suelo. Para encontrarlo había sacado antes varios artículos. Finalmente lo recogió todo y entró. Poco después descubrí que se había dejado un pequeño estuche en el suelo. Llamé a varios pisos a traves del portero electrónico, hasta que di con la chica. Y fue mientras bajaba cuando se me ocurrió la idea:
- ¿Podrías traerme un paraguas? voy a por mi coche, que está un poco lejos, y luego te lo traigo... un favor por otro.
Aceptó. Y así lo hice. Cuando bajó de nuevo para recoger el paraguas le dije:
- Gracias... y dale un besito a tu estuche de mi parte.
Ella sonrió y yo me despedí.
Y fue así como me libré de un buen remojón.
Lo ideal hubiera sido que, tras devolverle el paraguas, la chica me hubiese pedido otro favor: que subiera a su casa un momento para ayudarla con algún mueble o lo que fuese... y por supuesto, ese mueble hubiera terminado siendo la cama.
Pero en la vida, la realidad a veces (tantas) no coincide con el deseo...

martes, 8 de mayo de 2007

LA COMUNICACIÓN

Hoy he leído dos noticias. La primera informaba de una familia que había pasado casi un mes buscando a uno de sus miembros, desaparecido de repente sin dejar rastro. Resulta que había muerto atropellado y nadie les había informado del suceso.
La otra noticia era sobre un chico norteamericano de 20 años que decidió colgar un video en internet y se ofreció para hablar con todo el que lo necesitara. Estuvo treinta y pico horas hablando con diferentes personas.
Ambos sucesos hablan de la comunicación. Una vez leí algo de Antonio Gala que decía que lo que más desean los amantes después de a ellos mismos, es pregonar a los cuatro vientos que estan enamorados. Una alegría que se comparte es doble alegría. Una pena que se comparte es media pena. Sin comunicación no somos nadie.
Me imagino, quién sabe, el espíritu de la víctima del atropello tratando desesperadamente de contactar con su familia para hacerles saber que estaba muerto... según la noticia, lo consiguió a tiempo. Cuando la familia lo supo, estaban a punto de enterrar el cadáver. Menos mal.

sábado, 5 de mayo de 2007

NUEVO TRABAJO

Esta semana he empezado en mi nuevo trabajo. Quién me iba a decir que terminaría trabajando en el instituto donde estudié, teniendo de compañeros a algunos de mis antiguos profesores. Laboralmente he alcanzado mi objetivo: tengo el trabajo que quiero. O quizás sea mejor decir que quiero el trabajo que tengo. Es una suerte. O quizá sea mejor decir una satisfacción, porque nadie me ha regalado nada.
Soy consciente de que hay gente muy competente en peor situación que yo, por eso agradezco cada día lo que he logrado.
¿Realizarme laboralmente? Me conformo con hacer bien mi trabajo. No es poca cosa en un centro masificado como ese. Lograr hacer bien tu trabajo, sea cual sea, ya me parece lo suficientemente digno.
También tengo claro que trabajo para vivir, y no viceversa.
La vida siempre es lo primero.